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Un hermoso aforismo del poeta recientemente fallecido Carlos Edmundo de Ory: “La risa es el sexo del alma”…. Sábado, el día después del ahora de un viernes; y todavía tengo que comprar la botella de vino para la comida. Tal vez uno de Jumilla; o tal vez uno de Yecla. Creo que la sonrisa del espejo del cuarto de baño es mía, se me ha escapado mientras me afeitaba tarareando ninguna canción. Solo un mover de labios, musitando un silencio y manteniéndome la mirada con la vanidad del pistolero que sabe que no morirá, todavía no, en el duelo de la siguiente escena. Un callejón polvoriento, las cuatro páginas de un guión sobre la mesa del bar del polígono industrial, un sombrero detrás de la chimenea de un tejado rojo, la lámpara abandonada en la playa de las arenas blancas y un par de deseos acallados en las afueras. Y el de Ory, otra vez: “La poesía es un vómito de piedras preciosas"